El día de ayer nos invitaron unos primos al cumpleaños de una tía, le iban a festejar, pero solo familia "cercana" (aunque debo decir que es bastante jajaja) en realidad solo asistieron los hijos de mi tía con sus respectivas familias, además de otro tío, la pasamos muy bien conviviendo, bueno también comiendo jajajaja.
Bueno hubo un momento en el que comenzamos con las platicas anecdotarias, esas de los recuerdos, con las que se empiezan a soltar las carcajadas, y vaya que fueron muchas. El punto es que pensé en ese momento en lo que realmente significan los patriarcas y matriarcas de las familias, en que una vez que ellos ya no están con nosotros las familias comienzan a separarse poco a poco y todo esto se va perdiendo, cada quien se va haciendo camino por su cuenta y llega un momento en el que ya no se reunen los hermanos, los primos y así. Es triste de cierta manera si lo pensamos, he visto pasar eso en varas ocasiones con familias cercanas.
Lo peor de todo es que hasta pleitos o disputas y enojos llega a haber, lo mas malo es que los hijos, los sobrinos, nietos y demás no tienen la culpa pero terminan pagándolo, dejando de frecuentarse.
Creo que deberíamos todos de poner de nuestra parte y dejar de lado todo eso para convivir, recordar esos momentos buenos y malos que al final son los que nos tienen en donde estamos, con los cuales aprendimos cosas buenas y malas. Pero lo mas importante compartirlo con quienes nos rodean, la verdad que si mi familia se juntara toda tendríamos que hacerlo en algún lugar bastante grande pues es muy grande, que ojala se pudiera hacer por que eso seria genial.
Bueno, esta es solo una reflexión que quería dejar por aquí y ojala esta nos ponga a pensar un poco.
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